Por: Mauricio Arcega
Sin
duda es un tema muy polémico, sí se deba aceptar o sí se debería prohibir. Cada
vez la narco-cultura está más cerca de los niños, más fácil entran al crimen
organizado y como todos saben el problema es salir de estos actos delictivos.
La
música es un aspecto muy importante en la cultura creada por los narcos, es la
forma en la que atraen a la mayoría de los que se involucran. Los narco-corridos
tratan en ‘’hazañas’’, escapes, acciones y matanzas que realizan los capos de
los carteles. Endiosar a personajes que de ‘’Dioses’’ no tienen absolutamente
nada.
La
vestimenta es muy llamativa y a leguas se ven que son sicarios o están envueltos
en el narco, camisas con estampados brillantes, sombreros, botas, joyas muy exuberantes
y el típico acento del norte. Sin embargo, la identidad del narco a cambiado
bastante a como era en sus inicios, el look ranchero quedo atrás, ahora el look
se inclina a un ‘’JUNIOR’’ o padrotes, que se visten con ropa muy cara,
relojes, presuntuosos y prepotentes en toda la extensión de la palabra.
Las
costumbres y tradiciones son sencillamente ridículas, el tomar mucho alcohol y
embriagarse cada día, manejar a las mujeres como juguetes y sentirse propietarios de ellas, fiestas extremadamente costosas. Despilfarran el dinero
a montones pero de igual manera ganan dinero a montones.
La
narco-cultura está ingresando a la vida cotidiana de las personas, individuos
que nunca pensamos que estaban en el negocio de trafico de drogas y que hasta
eran tus amigos resultan ser lideres de carteles.
Es
un problema social pero también educativo, en la escuela y en el hogar, de que
sirve que en su casa le prohíban escuchar corridos si llegando a la escuela los
escucha con sus amigos.
Una
forma de regularizar o disminuir el contacto con las personas sobre esta
cultura sería educarlos en casa y escuela muy bien, explicarles que
consecuencias se tienen al entrar en ellos, concientizarlos y demostrarle que
no es un buen estilo de vida.
Algunas
personas por falta de recursos y oportunidades laborales recurren al narco pero
no deja de ser un estilo de vida muy riesgoso y preocupante para los que lo
rodean. Al pasar de los años se vuelve un problema más común en México.
(Tomada de la pagina Cine Garage)
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