Por:
Mauricio Arcega
Un
jueves en la clase de Antropología e Historia con el maestro y doctor, Raymundo
Padilla Lozoya, observamos y analizamos un documental para su materia, las
catacumbas que se encuentran en París, Francia.
Me
llamó muchísimo la atención ya que había leído y sabido que específicamente
esas catacumbas eran increíbles y muy singulares, la verdad estaba impaciente
por verlo. Al término del video me quede sorprendido, impactado y reflexivo, ya
que hay muchos factores que te hacen pensar y cuestionarse la existencia de
eso.
El
Documental me sorprendió que el ingreso a estas catacumbas sea prohibido ya que
muchos los conocen y puede fungir como un patrimonio turístico importante, pero
al ver las dimensiones del lugar y el tamaño que poseía, me di cuenta que sería
algo muy peligroso.
(Foto tomada del blog: http://www.ionlitio.com/las-catacumbas-de-paris/)
Hasta
el guía que iba con el reportero por unos momentos de perdió. Era colosal el
tamaño que abarcaban las catacumbas, parecía
literalmente un laberinto sin salida, y las ‘’entradas’’ a otros caminos o pasadizos
eran prácticamente un hoyo en la pared, una persona regordeta no entraría.
Dentro del laberinto existían como salas de tributos, cuartos amplios adaptados
como para que alguien expusiera un tema o idea a un gripo de personas, algo
impresionante.
Algo
que se me hizo muy curioso fue que dentro de las catacumbas se encontraban grafitis,
por todos lados existían estas formas de expresarse. Si nos ponemos a pensar,
alguien la hizo es obvio, así que jóvenes han entrado para rayar las paredes,
tal vez algunos entran para drogarse o mantener relaciones sexuales o ilícitas.
Algunos bocetos están muy grandes y detallados, entonces los grafitis no se
hacen en una hora demostrando que estuvieron más de unas horas o hasta varias ocasiones
entraban.
Para
eso, dicen en el documental, qué existen policías subterráneos encargados de
que nadie entre a las catacumbas, pero trabajando ahí puede ser peligroso
porque eso no evita que te pierdas y que nadie te encuentre y mueras en ellas.
Pero
los pasadizos finamente construidos no eran lo más intrigante en las catacumbas
de Francia, la existencia de un nivel más abajo donde los pasillos están construidos
por huesos humanos reales.
(Foto
tomada del blog: Mundo Esotérico y paranormal)
Un
laberinto con varios niveles, prácticamente un centro comercial subterráneo,
tiene mosaicos alineados de manera perfecta con cráneos, fémures y cajas torácicas,
construidos como un arte.
Eso
le da un toque muy tenebroso pero hay una explicación detrás de ello, las
catacumbas se dice que se usaban para resguardar a los ejércitos franceses en
la segunda guerra mundial, evitando contacto con las personas en las calles, se
movilizaban por debajo, hasta atacando de manera estratégica al enemigo.
Lo
que sí es verdad es que caminar por paredes de huesos es aterrador y misterioso
para cualquiera. Sin embargo, es necesario saber que existen ya que si
ocurriera un temblor fuerte lo más probable es que se derrumbe y caiga una gran
parte de la civilización parisina… Lo bueno que Francia no es un país que este
en una zona sísmica y es difícil que ocurra. En cambio, en Colima si tuviéramos
contracciones así, ya viviríamos en las profundidades.
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